Aunque hay discrepancias sobre el origen del aguacate, la evidencia más antigua de su consumo que se tiene hasta ahora está en una cueva de Coaxcatlán, Puebla, con una antigüedad de siete mil a ocho mil años.
El árbol se llama aguacatero, puede llegar a medir hasta 20 metros de altura. Sus hojas son verdes y grandes, las flores son diminutas y amarillas y de ellas nacen los aguacates.
Se recomienda que se cultive en altitudes de entre ochocientos y dos mil quinientos metros sobre el nivel del mar, en un terreno que esté protegido contra el viento.
Hay más de 400 variedades de aguacate en el mundo, según el clima en el que se cultivan, dando frutos con formas, sabores, texturas, colores y olores diversos.